JUAN CARLOS DEL ÁGUILA CARDENAS
Artículo del Periódico Digital LA SELVA.
“DESDE LA AMAZONIA”.
En Iquitos se vive momentos de miedo colectivo a raíz de sonados casos de asaltos con muerte en las calles. Lo último que vino a remecer a la población es el triste episodio de un infante de apenas 11 meses, víctima de un aparente parricidio, que murió apuñalado en la espalda «con un objeto punzo penetrante”.
Hace tres días, el jefe de la región policial de Loreto, general PNP Héctor Bernal, dio declaraciones en una emisora local indicando -lea bien- que en Iquitos «no hay ninguna actividad delincuencial que conlleve a magnificar temas de inseguridad ciudadana”.
La verdad que no sé en qué ciudad vive este alto oficial.
Luego de exponer estadísticas en incidencias delictivas poco creíbles, informó como un logro que aquí no hay casos de secuestros ni sicariato. Es verdad que secuestros de personas no hay, pero ello no quita -por ejemplo- que el hurto continuado de vehículos da espacios a la delincuencia para realizar extorsión.
Pero sicariato sí podría existir, en la medida que por la modalidad de gota a gota, quien no cumpla con pagar la remesa, finalmente termina acribillado.
Tampoco es un secreto que los prestamistas al menudeo, la mayoría paisanos del laureado García Márquez, coaccionen a humildes vendedores de mercados, bodegueros y otros pequeños emprendedores para que devuelvan la cuota diaria, donde los intereses son altísimos.
Pero todo esto que menciono es motor y motivo de la violencia callejera. Los asaltos en banda, perpetrados por sujetos que pululan en las afueras de los centros nocturnos, o de los bancos y entidades financieras, sí configuran una seria afectación a la seguridad ciudadana que el general parece no dimensionar.
Lo triste es que ni gobernador ni alcaldes asumen su rol y encaran al desubicado oficial de la Policía Nacional; pero ojo, ya se escuchan voces desde la propia población que piden su cambio.
El escenario descrito permite dejarle un mensaje al jefe regional de la PNP, rescatando un párrafo de la monumental obra «El General en su laberinto», cuando Gabo García Márquez dice:
«Y váyase ahora que todavía es joven, porque un día será demasiado tarde, y entonces no se sentirá ni de aquí ni de allá. Se sentirá forastero en todas partes, y eso es peor que estar muerto».
Iquitos, 15 de Mayo del 2023
